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MIÉ 16.01.2019
El Rayo Vallecano comenzó la temporada de su regreso a LaLiga Santander alternando actuaciones convincentes con otros partidos más grises. El equipo dejaba a menudo la sensación de que no conseguía alcanzar resultados a pesar de ser fiel a la identidad con la que ascendió, siendo penalizado a menudo por cometer errores individuales en zonas peligrosas.
Desde la jornada 17, Míchel decidió variar su habitual 1-4-2-3-1 para poner en disposición una defensa de tres centrales con dos carrileros profundos, tratando probablemente de reforzar el núcleo central de la defensa, la segunda más goleada de la competición por aquel entonces.
Primeros 16 partidos del Rayo: 10 pts. (15GF; 31GC = -16 AV)
Últimos 3 partidos del Rayo: 9 pts. (6GF; 2GC = +4AV)
El uruguayo Velázquez y el senegalés Ba, que no gozaron de continuidad durante el primer tramo de temporada, han aprovechado su oportunidad para convertirse, junto a Amat, en los tres centrales de esta defensa, ofreciendo más seguridad y contudencia. La presencia de tres defensores en la parte central ha permitido otorgar más libertad tanto a Advíncula como Álex Moreno, que actualmente tienen más posibilidades de lanzarse al ataque velozmente sin exponer tanto espacio a sus espaldas y representan una amenaza constante.
En la parcela ofensiva todo el ataque gira en torno a Raúl de Tomás, el jugador más decisivo de la plantilla de cara a gol. Durante estos tres partidos ha estado acompañado en los costados, fundamentalmente, por Trejo y Embarba, dos hombres complementarios, con vocación ofensiva, que ofrecen soluciones diferentes al Rayo: el primero aglutina balón, lo protege y consigue que el equipo acumule posesiones largas con su calidad y experiencia; el segundo dinamiza todo balón que pasa por sus pies y posee tanto desobrde en el uno contra uno como capacidad para asistir y golear.
En la jornada 12, antes de comenzar la racha de triunfos, Míchel decidió dar un cambio en la portería, apostando por la titularidad de Dimitrievski en lugar de Alberto. El portero macedonio ha brillando desde que entró en el once del Rayo, con actuaciones soberbias como la de Pucela, donde realizó numerosas paradas includo un penalti detenido en el 88’ para salvar el 0-1.
También merece una mención Santi Comesaña, el mediocentro (reconvertido) que más minutos ha disputado en el equipo, que ha mejorado notablemente su aportación tras el cambio de sistema. Imbula y Medrán se disputan el puesto restante como acompañante de Santi, habiendo disputado más minutos el africano por la lesión del español.
Lo cierto es que si solo tuviéramos en cuenta los puntos disputados durante las últimas tres jornadas de LaLiga Santander, solo el FC Barcelona (líder actual) y el Rayo Vallecano han obtenido las últimas nueve unidades en disputa. Un dato demoledor que demuestra claramente la mejoría que ha experimentado el equipo de Vallecas bajo su nueva organización sobre el césped.
El Rayo de Míchel ha alcanzado el ecuador de LaLiga Santander en la plaza que marca el descenso, pero los nueve puntos consecutivos han catapultado la moral de la plantilla rayista, que todavía tiene mucho que decir en la mejor competición de clubes del mundo.
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