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SAB 22.03.2014
Los tres puntos que consiguió el Málaga CF ante en RC Celta de Vigo en la 29ª jornada de la Liga BBVA suponen mucho más que una simple operación en positivo para el conjunto andaluz, que coge oxígeno y despega en la tabla tras una larga e irregular racha.
Aunque los celestes dominaron el juego en la primera mitad, el Málaga tiró de efectividad y convirtió en goles dos errores de la defensa rival. Lo hizo gracias a la picardía del joven Ignacio Camacho que, primero en un rechace y después de cabeza, marcó los tantos de la victoria antes del descanso.
El técnico Luis Enrique movió ficha y metió a Rafinha en el terreno de juego en el segundo tiempo para inyectar intensidad a su equipo. Y aunque los gallegos tuvieron varias ocasiones para recortar distancias e intentar sumar algún tanto, la puntería no acompañó a los Nolito, Rafinha, Charles y compañía. El Málaga abandonó Balaídos satisfecho y con la sensación de haber hecho los deberes a tiempo en la Liga BBVA.
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